Asar berenjenas al horno

Berenjena al limón

Esta receta de berenjena asada es tan sabrosa que puede que la devores directamente de la bandeja del horno. Sí, incluso los escépticos de la berenjena. Lo malo de cocinar berenjenas es que es fácil equivocarse. Si no se hace lo suficiente, queda esponjosa y dura. Si te pasas, se hace papilla. Pero si se hace bien, la berenjena es una de las verduras más sabrosas que existen. Salen del horno muy bien caramelizadas y doradas por los bordes y tiernas en el centro. Es prácticamente infalible, sobre todo con mis consejos y trucos a continuación, y es realmente versátil. Sírvela como guarnición con hierbas frescas y limón, añádela a una ensalada o mézclala con pasta. Una vez que tengas esta receta de berenjena asada en el bolsillo, nunca te quedarás sin formas de usarla.

Consejos para la receta de berenjena asadaEsta receta de berenjena asada no puede ser más sencilla: trocea una berenjena, úntala con aceite de oliva y sal, y ásala en el horno hasta que esté tierna y dorada. Fácil, ¿verdad? Pero antes de que empieces a cocinar, aquí tienes algunos consejos extra que te ayudarán a que esta receta de berenjena asada te salga siempre perfecta:

¿Es necesario pelar las berenjenas antes de asarlas?

Mientras que la piel de una berenjena pequeña y joven es comestible, la de las berenjenas más grandes o viejas se vuelve amarga y debe pelarse. En caso de duda, la respuesta a "¿Hay que pelar las berenjenas antes de cocinarlas?" es sí, pélelas.

¿Es necesario salar las berenjenas antes de asarlas?

Si es la primera vez que prepara berenjenas para cocinar, quizá se pregunte: "¿Es necesario salar las berenjenas?". La respuesta es no. Gracias a los avances en el cultivo de la berenjena, la mayoría de las veces no es necesario salarla. Para la mayoría de las recetas, simplemente la corto en rodajas y ¡a cocinar!

¿Es mejor freír o cocer las berenjenas?

Freír la berenjena significará utilizar bastante aceite para dorar la berenjena empanada. Hornear la berenjena empanada en una bandeja en el horno requiere mucho menos aceite, y es un poco más ligero y saludable. Sea como sea, el plato estará excepcionalmente delicioso.

Salsa de berenjena

Hornee la berenjena como de costumbre y deje que se enfríe completamente al salir del horno. Una vez frías, póngalas en una bolsa apta para congelador y guárdelas en el congelador.

Una buena alternativa es asar las verduras en una sartén. Pon un poco de aceite de oliva en la sartén, caliéntala a fuego medio-alto y añade las verduras. Reduce el fuego a medio y cocina hasta que las verduras se caramelicen.

Mi segundo método favorito es asar las verduras en una barbacoa o parrilla. Aunque no es tan cómodo como meter una sartén en el horno, las dos opciones anteriores funcionan muy bien en caso de apuro.

Tahini de berenjena

Para que todo sea lo más sabroso posible, esta receta utiliza un método de dos pasos. Para empezar, se pone la berenjena en salmuera, lo que le añade sabor y ayuda a eliminar el gusto amargo que impide a la mayoría de la gente comerla cruda. A continuación, las rodajas se untan ligeramente con aceite para que se doren bien mientras se hornean. La receta se puede duplicar y triplicar fácilmente según sea necesario. Es posible que tenga que trabajar por tandas, dependiendo del espacio del horno y del acceso a las bandejas para hornear.

La berenjena asada se puede utilizar en platos como la berenjena a la parmesana y la ensalada turca de berenjena asada. También es una deliciosa guarnición, sobre todo si se adereza con cosas sencillas como vinagre balsámico, tomates y albahaca.

El proceso se llama salmuera, y utiliza el poder de la ósmosis para ayudar a la berenjena a mantener su humedad natural mientras se cocina. Esto, a su vez, ayuda a la berenjena a conservar su forma en lugar de convertirse en un desastre blando. Además, la berenjena se sazona muy bien.

No es necesario quitar la piel de la berenjena. Las berenjenas jóvenes y algunas variedades tienen una piel fina que contiene gran parte del valor nutritivo, por lo que puede conservarse y comerse tal cual. En el caso de las berenjenas de piel gruesa, o si es una preferencia personal, se puede quitar la piel. Dejarla mientras se cocina facilita su manipulación.

Cómo cocinar berenjenas

Marcus Reeves es un experimentado escritor, editor y verificador de hechos. Comenzó su carrera escribiendo para la revista The Source. Sus artículos han aparecido en The New York Times, Playboy, The Washington Post y Rolling Stone, entre otras publicaciones. Su libro Somebody Scream: Rap Music's Rise to Prominence in the Aftershock of Black Power fue nominado para el premio Zora Neale Hurston. Es profesor adjunto en la Universidad de Nueva York, donde enseña redacción y comunicación. Marcus se licenció en Letras por la Universidad Rutgers de New Brunswick (Nueva Jersey).

La berenjena, rica en fibra y antioxidantes anticancerígenos y baja en calorías (sólo 20 por taza), es uno de los vehículos más versátiles para introducir a hurtadillas un aporte nutricional extra en las dietas tanto de los melindrosos como de los amantes de las verduras. Su textura robusta y sabor suave permiten varios métodos de cocción, como empanarlas, hornearlas y mucho más. Aunque las berenjenas se pueden encontrar en los supermercados durante todo el año, la temporada alta es de julio a octubre. Así que, a finales de verano, le conviene tener a mano estos consejos sobre cómo preparar berenjenas. Hemos reunido una guía completa de las mejores formas de cocinar berenjenas.

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